José Luis Braga, médico del Batallón 4, condenado a 12 años de prisión: fiscal Perciballe recordó que "era más que un cumplidor de órdenes"

El médico José Luis Braga Rosado fue condenado a 12 años de prisión, este miércoles, en una resolución de la jueza Karina García y que recogió el pedido del fiscal especializado en crímenes de lesa humanidad, Ricardo Perciballe. Durante la dictadura, el doctor Braga desempeñó tareas en el Batallón de Ingenieros 4, de Laguna del Sauce, y según la investigación, era quien evaluaba la condición de los detenidos en sesiones de tortura e indicaba cuándo parar o continuar. Los hechos sucedieron entre 1972 y 1976. En declaraciones a la Página Central de la Revista, de FM GENTE, este jueves, el fiscal Perciballe recordó que el rol de Braga "era más que (el de) un cumplidor de órdenes".

Perciballe dijo estar “conforme” con la condena de 12 años y calificó al Batallón 4 como un lugar “muy duro” para quienes estuvieron detenidos allí durante la dictadura.

Braga, de 78 años, cumple régimen de prisión domiciliaria, habilitado por informes médicos, y el fiscal explicó que se realizan evaluaciones periódicas para ver si continúa en esa situación o puede cumplir prisión efectiva.

El proceso de la causa del médico militar retirado fue extenso, e incluyó el archivo y desarchivo del expediente. En 2020, Perciballe pidió el procesamiento con prisión de Braga como cómplice del delito de abuso de autoridad. El argumento que utilizó fue que el médico había examinado a varias víctimas de torturas, para establecer si su condición física permitía que siguieran siendo torturadas. En ese momento, el juez Rubén Echeverría rechazó la solicitud y archivó el caso. En 2023, luego de que Perciballe recopilara más testimonios, la justicia procesó con prisión a José Luis Braga, como presunto coautor penalmente responsable de reiterados delitos de abuso de autoridad y de lesiones graves.

Esa sentencia indicaba que Braga era quien se encargaba de revisar a los reclusos, realizando valoraciones médicas de rutina respecto al ingreso o traslado de un detenido. Varios de los denunciados expusieron que, de acuerdo a la valoración médica de Braga, se continuaban o se suspendían las torturas.

En la entrevista con FM GENTE, este jueves, el fiscal Perciballe dijo que el caso de Braga "refleja una triste realidad del interior", porque las víctimas continuaron viendo a los victimarios, algo que no ocurrió con tanta frecuencia en Montevideo.

“Esa es una triste realidad del interior. Nosotros priorizamos mucho en el interior porque las víctimas del interior sufrieron más en que en Montevideo, porque en Montevideo se pierde el tema de la cercanía con los represores. Hay un cierto anonimato. En el interior tenemos casos que después los represores eran directores de liceo, del hospital, eran hombres reconocidos por la sociedad, pero con un pasado triste. En este caso se daba esta situación, las victimas se encontraban con su victimario actuando en otra función. Es muy característico del interior”, remarcó el fiscal.

Durante los años en los que Braga trabajó en la intendencia de Maldonado, en distintas administraciones, hubo una época en la que estaba asignado a los servicios médicos y examinaba a quienes realizaban el trámite para la licencia de conducir. Uno de los denunciantes en su causa judicial, contó que se encontró con él cuando fue a renovar su permiso. Según el denunciante, se reconocieron y Braga le dijo que solo se limitaba a cumplir órdenes. “La condena deja en claro que (Braga) era más que un cumplidor de órdenes”, aseguró el fiscal Perciballe.

“Hay varios (casos de este tipo vinculados a médicos) y varios en el interior... Es común porque quienes ejercían la tortura estaban acompañados de médicos que decían se puede más, se puede menos, aflojen. Lamentablemente es una práctica que se utilizó”, agregó.

Perciballe recordó que la instancia judicial que finalizó con la condena de Braga involucró a decenas de jóvenes, muchos de ellos estudiantes de magisterio, que “por el sólo hecho de resistir a la dictadura fueron vilmente torturados, picana eléctrica, submarinos, plantones”, después de haber realizado pintadas o entregado volantes.

Perciballe se refirió también a lo que significó el Batallón de Laguna del Sauce durante la dictadura. “El Batallón de Ingenieros 4 fue un lugar muy duro. Ahí mataron a Francisco Chocho en el 72 por torturas, un simpatizante del Partido Nacional. Después hicieron desaparecer el edil Horacio Gelós Bonilla y a un simpatizante del MLN. Además de decenas y decenas de personas que fueron privadas ilegítimamente de la libertad por el sólo hecho de resistir a la dictadura. Ingenieros 4 fue un lugar muy duro para las víctimas”, resaltó.




en base a FM GENTE
foto: publicada por @joaquingarlo en junio de 2020 en su cuenta de X